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Reseña de El silencio de las olas, de Ángela Banzas
En general, no puedo decir que no me haya gustado, pero su forma de escribir es tan ampulosa, utiliza tantos símiles, una prosa tan florida, y casi etérea, que cuesta bastante entrarle. De hecho, las primeras páginas tuve que leerlas hasta tres veces para entenderlas y esto me desanimó bastante al principio.
No siendo porque fue un regalo de mi señor marido (no es machismo, es que él cuando habla de mí con alguien se refiere a “mi señora”) y porque era la edición impresa (más cara que la kindle) seguramente no hubiera seguido leyéndola. A medida que avanza la narración la cosa va menguando (o es que uno se acostumbra) y mejorando, pero sería de agradecer una narración más directa, sencilla y asequible al común de los mortales.
También utiliza gran cantidad de descripciones que, desde mi punto de vista, sobran. Es más, si no hiciese tantas y utilizase una prosa más sencilla, la novela se reduciría a la mitad, por lo menos.
La historia, aunque con muchos tópicos no muy bien llevados, no está mal, es interesante pero muy predecible. Los personajes son bastante típicos y no puedo decir mucho más sin desvelar todo el lío.
No tiene final. Bueno, sí, la novela acaba, pero deja la puerta abierta a la continuación ya que la historia no concluye.
Si escribe la siguiente la leeré, por supuesto, pero espero que mejore.